Es primero de enero, la mayor parte de la gente estará recuperándose de la fiesta de fin de año, los posts nostálgicos de lo que fue el 2017 ya se escribieron y es tiempo de 2018.
Este post retrospectivo tuve que escribirlo apenas ahora que realmente terminó el año, con las emociones apaciguadas por el comfort de unos días de reflexión.
2017 fue un año complicado, no lo negaré, 2017 fue un año en el que también pasaron algunas cosas extraordinarias, 2017 fue un año diferente definitivamente.
Empecé el año en caída libre, una vez que el polvo de la caída se aclaró pude ver que había caído en un lugar inesperado pero en el que aprendería lecciones muy importantes. Desde el 1ero de febrero me convertí en asesora de socios en la Cámara Mexicano Alemana de Comercio e Industria, la ironía de regresar a trabajar con alemanes, la ironía de sentirme en casa.
Les presento a mi yo godín (oficinista).
Pasaron los meses y en mi primera salida del trabajo a Querétaro conocí a dos personas magníficas, con las que pude empezar a sentirme menos sola en mi pluriculturalidad y en muchas otras cosas. De este corto viaje tengo memorias muy lindas. Puse en práctica algunas de las lecciones que me enseñó mi jefa para convetirse en un ninja de cambiar tarjetas de presentación. Reconozco que me he vuelto bastante fluída en el juego de hacer relaciones públicas.
Gracias a mi curiosidad innata decidí probar algo nuevo, quería que la Cámara fuera más activa en eventos de tecnología, y logré cerrar una colaboración con el evento de tecnología y talento más grande de México, Campus Party, gracias a el apoyo una vez más de mi jefa, logré poner en movimiento una iniciativa que sería el inicio de nuevos retos.
Durante la participación de la Cámara en Campus Party en Guadalajara dimos una plática sobre lo que hacemos y tuve la oportunidad de conocer gente muy interesante, de ver una ciudad nueva, y de ser parte de un evento que me dejó motivada y llena de energía.
Mi hermana de la vida, mi Martina Valarezo vino a visitarme este año también, paseamos, comimos delicioso y como si fuera un sueño fuimos juntas a la casa de Frida, juntas en la casa azul sentí que la vida me había regalado un privilegio extraordinario por tener a esta persona maravillosa en mi vida y por poder compartir algo que amamos juntas.
Poquito después me subí en un avión para festejar mi cumpleaños 30 en mi lindo Ecuador. Apenas llegar nos aventuramos a la laguna del Quilotoa con la familia de mi esposo y mi familia. La bajada a la laguna no es para los débiles de corazón, pero vale totalmente la pena.
Mi cumpleaños lo festejé con mis papis y mi esposo en un lugar mágico: Mindo – Ecuador. Hasta el medio día tuve un cumpleaños bendecido, desperté entre el canto de pájaros, rodeada de montañas, feliz. Mientras comíamos algo recibimos la llamada sobre el terremoto aquí en México.
Una semana después di mi curso “Fotografía para Redes Sociales” con el coworking Conexión EC, un curso en el que había trabajado durante 8 meses y que tenía más de 2 años en preparación. Fue un día hermoso, estaba nerviosa, pero me sorprendió lo natural que se me hizo pararme frente a mis alumnos, lo natural que fue compartir lo que sé. Me lleno de emoción ver como después de la parte práctica muchos de mis alumnos habían logrado ya mejorar su fotografía. Fue un pequeño logro, pero fue un logro que me ha enseñado que en mi futuro habrán más cursos, más conferencias y más de mi sobre un escenario. Como cantante los escenarios no han sido algo ajeno, pero nunca me esperé que volvería a uno de ellos compartiendo conocimiento.
Además durante mi viaje pude ver a mi familia, abrazar a mi abuelito y a mis primas. Con mis amigos me reí y celebré sus logros, fue el mejor regalo darme la oportunidad de estar junto a la gente que me hace feliz.
Regresé y a finales de octubre me pasé por Monterrey. Además de tener mi primera experiencia como traductora simultánea durante una presentación de la cámara con el atleta extremo Robby Clemens, tuve la oportunidad de volver a ver a mis queridos amigos Carlos y Marcela y de ver por primera vez a su retoño. Mi sobrino postizo se robó mi corazón e hizo que el viaje fuera mucho más especial. Me recordó que a pesar de estar empezando desde 0, tengo amigos que me reciben con los brazos abiertos en muchos lugares, eso es una bendición.
Noviembre fue el mes en que por fin tomé acción para hacer realidad mis sueños una vez más. Encontré a mi coach de vida gracias a la guía divina. Hoy estoy escribiendo las primeras páginas de mi plan de negocios, para un proyecto que me hace ver que de verdad no hay mal que por bien no venga.
En diciembre, con la batería muy baja ya, hice avances en areas inesperadas. Hay cosas que todavía no es tiempo que salgan a la luz. Lo que sí puedo compartir es que después de muchos años mi mamá regresó a su ciudad. La recibí con los ojos cansados pero llenos de gratitud, este día parecía que nunca llegaría pero ahora tengo a mi mamá aquí en mi casa. Pocos días después llegó también mi papi querido y hemos pasado unos días ajetreados pero también muy bendecidos.
Con mis papás aquí me di cuenta que ya me muevo en la ciudad con mucha facilidad, que conozco los nombres de las avenidas principales, que no me pierdo en el centro, que hasta puedo jugar a la guía turística con mis amigos y familia, eso es para mi un logro, porque esta finalmente es mi ciudad también. Cada día que paso en ella me vuelvo más chilanga y me encanta.
Menos importante pero igual positivo, este año por fin compré mi nueva cámara y un nuevo lente y en general me di algunos gustitos comiendo rico y paseando por esta ciudad que nunca duerme.
Este año aprendí:
- Los artistas solo pueden florecer si abren su mente a ser mucho más que eso.
- En la vida hay días, meses y hasta años de preparación, el proceso a veces nos parece demasiado largo, pero es necesario.
- Los fracasos pueden servir de inspiración, los fracasos a veces son formas en que Dios nos pone en un mejor camino.
- Nunca estoy sola, Dios siempre está a mi lado, si dejo que sus milagros actuen en mi vida, todo se hace más sencillo.
- Conoce el sistema y luego sácale provecho.
- Las personas sólo tienen poder sobre mí, si yo se los doy. Nadie me puede decir que puedo o no hacer.
- Amar lo que haces hace toda la diferencia en como vives tu vida. Si no puedes hacerlo ahora, busca una forma de hacerlo en el futuro, no es sencillo, pero es la mejor forma de pasar nuestro tiempo en esta tierra.
Gracias por todas estas lecciones vida, gracias 2017 porque te sobreviví y hasta te saqué provecho, gracias 2017 porque mostré que soy mucho más fuerte de lo pensaba.