La vida se vuelve mucho mejor cuando tienes un perro, hace algún tiempo ya rescaté a mi Ramona, una perrita mestiza que me robó el corazón desde el primer día que la vi. Así que cuando tomamos la decisión de mudarnos de Ecuador a México naturalmente nuestra primera preocupación fue como ibamos a transportar a nuestra integrante más nueva de la familia. Algunos conocidos y familiares nos preguntaron si la íbamos a dejar, pero sinceramente para nosotros esta jamás fue una opción. Uno no abandona a un miembro de la familia.
Si tu también quieres llevar a tu perrícola en tu nueva aventura necesitas considerar algunas cosas antes de emprender el vuelo.
1. Considera si es absolutamente necesario viajar con tu mascota
Viajar en avión para una mascota, aunque sea en la parte de arriba del avión es una experiencia estresante. En nuestro caso no teníamos opciones ya que estábamos mudándonos de país.
Para viajes cortos o de vacaciones siempre es buena idea dejarla con un familiar, un amigo o un hotel canino. Aquí en la ciudad de México encontramos un servicio que se llama Cuida mi mascota en donde puedes encontrar personas que cuiden de tus animalitos.
2. Infórmate
Para viajar con tu mascota hay una serie de requerimientos dependiendo del país de partida, y de destino. Para viajar a Europa o a Estados Unidos hay más requerimientos que pueden tomar más tiempo.
Lo que a nosotros nos pidieron para llevarnos a Ramona a México fue:
-Certificado de vacunación al día.
-Certificado de salud de Ramona certificado por un veterinario.
-Certificado de exportación del Ministerio de Agricultura en donde se muestra el certificado del veterinario y se revisa a la mascota.
-Certificado de importación (Te lo dan al llegar al aeropuerto en México presentando los papeles anteriormente mencionados).
3. En caso de viajar en Avión
Deberás de ponerte en contacto con la aerolínea con la que vayas a viajar y preguntar cuales son los costos y condiciones. La mayor parte de las aerolíneas te hará firmar un entendimiento de que no se hacen responsables si tu mascota no llega en buenas condiciones. Es una practica horrible pero bastante estándar.
En mi caso estaba extremadamente nerviosa por Ramona ya que ella tuvo que viajar en la parte del equipaje del avión. Muchas aerolíneas tienen historial de tratar mal a los animales.
Con Aeromexico tuvimos una buena experiencia y en los posible parece estar bien.
4. Planea tu viaje pensando en tu mascota
Una de las preocupaciones mayores era que Ramona no llegara en buenas condiciones e incluso sin vida a mis manos. Por lo que me informé hasta el cansancio sobre las cosas que era mejor evitar para que tu mascota no sufra.
Evita en lo posible los vuelos con conexiones. Mientras más conexiones tenga un vuelo más tiempo pasará tu mascota en las pistas de los aeropuertos que es en donde suelen sufrir más ya sea por el calor o por el frío. Mientras más dure el viaje también hay más peligro de que sufra deshidratación.
No viajes en invierno o verano. Mientras más extremas son las condiciones del clima más peligro correrá tu mascota. El problema no es durante el vuelo, pero sí durante el tiempo entre subir a tu mascota al avión y cuando la bajan.
Si es posible compra un boleto de primera clase. Mientras no siempre es posible, esta puede ser una buena opción si tu mascota va en la parte de abajo del avión ya que las mascotas son tratadas como equipaje. Primera clase tiene equipaje prioritario y saldrá más rápido del avión. Otra opción sería preguntar si hay posibilidad de marcarla como equipaje prioritario. Aunque normalmente sacan primero a los animales, no puede hacer mal preguntar.
No olvides pegar una copia de todos los papeles a la caja en la que irá tu mascota.
5. Compra la caja para transportar a tu mascota con tiempo
Tu mascota necesita tiempo para conocer su caja. No pretendas meterla el día del viaje, además de que se separará de ti estará en un lugar que le resultará extraño y puede estresarse más de lo debido. Si no está entrenada puede lastimarse al intentar abrir la puerta con los dientes.
También la caja debe ser los suficientemente grande para que se pare y se pueda dar la vuelta.
Tómate de 2 a 3 semanas para entrenar a tu mascota, de preferencia debería de dormir ahí para que sienta que es un lugar seguro. El día del viaje no olvides poner una base suave y tal vez algo de ropa con tu olor para que se sienta más tranquila. Asegúrate también de que esté bien cerrada su caja antes de que la dejes, no hay nada peor que un perro o gato perdido en el aeropuerto.
A la llegada a México destruirán cualquier cosa que esté en la caja de tu mascota así que prepárate para que se vaya a la basura lo que sea que hayas puesto adentro.
6. Prepárate para la llegada de tu mascota
Si es posible que alguien te recoja en el aeropuerto pídele a esa persona que lleve un suero y una jeringuilla sin aguja en caso de que tu mascota llegue muy deshidratada. Si nadie te puede recoger lleva unas galletas para tu mascota y un tazón de plástico que puedas llenar para darle agua cuando salga. En muchos aeropuertos no te permitirán sacar a tu mascota de su caja hasta que hayas salido del aeropuerto, pero intenta llevarla lo más pronto posible a un lugar donde pueda caminar un poco, esto la hará sentirse mejor. Nosotros sacamos a Ramona dentro del aeropuerto porque en cuanto Ramona me vio se desesperó y necesitábamos tranquilizarla para que no se lastimara.
Un paseo rápido afuera del aeropuerto para que haga sus necesidades y tome agua o coma algo si quiere son una buena opción antes de seguir tu camino.
7. No entres en pánico
Tal vez este consejo no lo necesitas pero si estas muy nervioso por que tu mascota vaya a viajar con las maletas ten la tranquilidad de que hay muchos animales que viajan de esta forma y llegan sanos y salvos. Las condiciones de presión y temperatura en donde van las maletas es la misma que en la cabina, así que por eso no hay necesidad de preocuparse. Si tu mascota es vieja o está enferma es mejor no subirla a un avión ya que es una situación muy estresante para ellos. Jamás había visto a Ramona tan asustada y ansiosa, hay muchos animales que no soportan el viaje por esto. Lo que me ayudó fue saber que habíamos planeado todo con tiempo, que Ramona estaba acostumbrada a su caja y que dentro del avión estaría tranquila con sus cosas.
Si tu mascota siente que estás nervioso va a sentirse nerviosa también. Mantente en calma en todo momento. No hay necesidad de hacerle sentir que algo anormal está pasando. (Aunque sea mentira).
No es fácil viajar con tu mascota y requiere mucha preparación pero tampoco será el fin del mundo.
Espero que sus mascotas lleguen a su destino salvas y sanas para que les den muchas más alegrías.
Cambio y fuera desde Ciudad de México con una Ramona muy feliz.