Estoy teniendo una de esas semanas en que he tenido que poner todo en perspectiva, y en esos días inevitablemente me pregunto por enésima vez. Soy lo suficientemente buena para esto? Estoy desperdiciando mi tiempo? Estas preguntas me visitan regularmente, cada vez toma más tiempo para que mi ego aparezca. Pero usualmente la pregunta de si somos lo suficientemente buenos suele llegar porque empezamos a comparar nuestro trabajo con el de otros.
Yo soy fan de hacer tableros llenos de inspiración con trabajos de otros, pero cuando no me siento segura de mi misma siento que es importante no ver el trabajo de alguien más sino el mío. La memoria es frágil y a veces es necesario refrescarla. La única medida para nuestro éxito es nuestro progreso como individuos. El camino de cada quien es diferente, todos venimos al mundo en diferentes situaciones y somos únicos e irrepetibles es por esto que no tiene sentido compararse con nadie, sobre todo como artistas.
Así que la próxima vez que se quieran comparar, háganlo con la persona que un día fueron.
Redescubriendo mis fotos encontré esta foto, hoy la volvía a retocar y vi con gran satisfacción que he aprendido un truco o dos 🙂