Hace un par de días cumplí años de nuevo, y a pesar de no ser un número especial, siento que he crecido mucho. De las cosas más importantes que he aprendido es que la vida después de la universidad no suele ser lo que nos han pintado durante todos esos años en el sistema educativo. Salir a la vida real significa enfrentarse a muchas cosas que no esperabamos, porque la verdad es que no nos preparan para vivir en el mundo real. Así que uno aprende a la fuerza y estas son un par de cosas que he aprendido.
No te lo tomes personal
Puede parecer algo muy obvio pero en realidad no lo es, aplicando para trabajos muchas veces me sentí rechazada y disminuida porque por enésima vez llegaba una negativa. Así que uno inevitablemente se hace la pregunta ¿acaso no soy lo suficientemente bueno? Pero en realidad esta pregunta es un poco irrelevante, apenas ayer estaba viendo la fotografía de una portada de revista que era mala, mala iluminación, pose, expresión. Pero la foto estaba ahí y la persona que la hizo probablemente piensa que hizo un buen trabajo. Así que a veces es solo cuestión de suerte; sí, muchas veces toda nuestra preparación ayuda a que tengamos el mejor trabajo, pero realmente la educación ya no garantiza nada, ni las notas, ni que tan “buenos” seamos. A veces necesitas estar en lugar adecuado, en el momento adecuado.
Entonces lo único que queda es no frustrarse, no tomarlo personal y continuar con la cabeza alta. No es fácil, sobre todo cuando uno está convencido que el trabajo de tus sueños está en la bolsa y recibes otra negativa.
Contactos, contactos, contactos
Quisiera decirles que en el primer mundo no se necesita recurrir a las mañas para conseguir un buen trabajo, pero tengo que decepcionarlos. No voy a dar datos exactos porque no quiero mal informarlos pero una gran cantidad de trabajos nunca llegan a las bolsas de trabajos, porque simplemente se los dan a conocidos de amigos, amigos o familia. Si a esto le añadimos que en el medio creativo hay muchos más aplicantes que trabajos, no tener contactos significa que tus posibilidades se reducen bastante. Así que si están todavía estudiando tomen nota y sean buenos conocidos, a veces una sonrisa, un gesto genuino de aprecio por otra persona pueden cambiar su vida.
El interés, lo mismo que todo lo demás en las relaciones humanas, debe ser sincero. Debe dar dividendos no sólo a la persona que muestra el interés, sino también a la que recibe la atención. Es una vía de dos manos: las dos partes se benefician. – Dale Carnegie
Considero que el mayor bien que poseo es mi capacidad para despertar entusiasmo entre los hombres, y que la forma de desarrollar lo mejor que hay en el hombre es por medio del aprecio y el aliento. -Charles Schwab
Nada es para siempre
Otra cosa que parece ser bastante obvia pero como seres humanos nos encanta considerarnos el centro del universo cuando en realidad somos tan pequeños. Cualquier problema, cualquier sentimiento, ya sea felicidad, angustia, emoción o rabia todo es temporal. Cuando todo se siente abrumador y solo queremos que nos trague la tierra es bueno recordar que mañana será otro día y que solo la muerte es irremediable. Recordar esta verdad hace que todo se sienta menos grave. Sucede que como soy una persona muy intensa tiendo a ver como una gran tragedia griega a todo lo que me suceda, cuando es bueno es genial y cuando es malo quiero esconderme debajo de una roca. De cualquier forma cada vez que pierdo perspectiva intento pensar en alguna cosa negativa del pasado y ver que hoy no se ve tan terrible como en el momento en el que estaba pasando.
Cada día tiene su belleza
Tengo que admitir que este año de mi vida fue una prueba para todas las cosas que digo y en las que creo. Sé que soy una persona fuerte, pero me he sentido débil y perdida. Sé que tengo potencial pero sin saber en donde poner mi energía he creído que no me estoy esforzando los suficiente. Y entonces uno se puede deprimir muy rápido, los días se vuelven largos y los largos inviernos (Dios este año no parecía que se iba a acabar) pueden quitarle la sonrisa hasta al más optimista. Entonces es bueno tomarse cada día a la vez y lograr apreciar algo bueno en cada día, ya sea tu café matutino, la forma en que la luz entra por la ventana, unos copos de nieve bailando o el sonido de la lluvia en la ventana. Una de las razones por las que amo la fotografía es la oportunidad que nos da de encontrar belleza en las cosas cotidianas. Durante mi proyecto 365 me vi obligada a practicar este principio y no solo fue un año en que tome muchas fotos lindas sino un año en que aprendí a ver lo bello en las pequeñas cosas.
No te des por vencido
Y esta debe ser la lección principal de este año, no porque no supiera la verdad que encierra sino porque cuando tu mundo está de cabeza, te sientes desorientado y deprimido tienes que recordar quien eres. Hoy puede ser un día malo, y en un mes las cosas no se verán mejores, y quien sabe tal vez tienes un año que parece un desperdicio pero si nos concentramos en lo que realmente queremos y no dejamos de trabajar activamente en nuestro sueños, en algún momento veremos que todo ese tiempo que vimos como perdido nos estaba preparando para cosas mejores. No pienses que eres el primero al que le dicen no, mucha de la gente exitosa ha tenido que trabajar muchos años para llegar a donde están y a veces puede parecer que tuvieron suerte porque de repente alguien noto su trabajo, pero eso no sucede sin que recibas negativas antes.
Así que sigo en la dura lucha como dice mi pa. No voy a dejar de trabajar en mis metas y no voy a dejar de soñar. El camino cambia todo el tiempo pero la meta sigue siendo la misma. Y para probarme a mi misma esto en mi cumpleaños me tome un autorretrato que reflejara esto. Esta soy yo. Un poco más espabilada pero con las mismas ganas.